La situación en Pumas se ha vuelto tensa en las últimas semanas, especialmente en lo que respecta a la dirección técnica del equipo. Con el rendimiento del plantel en la cuerda floja, la directiva se encuentra ante la necesidad urgente de tomar decisiones que podrían cambiar el rumbo del club.
Miguel Mejía Barón, vicepresidente deportivo de Pumas, ha puesto sobre la mesa una propuesta que podría redefinir el futuro del equipo.
Según fuentes cercanas, Mejía Barón está considerando la llegada de Guillermo Vázquez como nuevo entrenador, mientras que Ricardo Ferretti, un técnico con una vasta trayectoria en el futbol mexicano, asumiría el rol de asesor técnico. Esta combinación busca aprovechar la experiencia de ambos para revitalizar a un equipo que ha mostrado irregularidad en su desempeño.
La propuesta ha generado un intenso debate dentro de la organización. Algunos miembros de la directiva y del patronato ven con buenos ojos esta opción, mientras que otros defienden la continuidad de Gustavo Lema, el actual director técnico.
La gestión del entrenador argentino ha estado marcada por resultados inconsistentes y un estilo de juego que no ha logrado convencer a los aficionados, lo que ha puesto su futuro en la cuerda floja.
Uno de los factores que ha complicado la situación es la aparente falta de respaldo interno hacia Lema. A pesar de contar con el apoyo público de la directiva, la división en torno a su figura podría ser determinante para su continuidad. La presión de los aficionados y la necesidad de resultados inmediatos están llevando a la directiva a considerar un cambio en la dirección técnica.
El futuro de Pumas es incierto y la decisión que tome la directiva en las próximas semanas será crucial. Si se concreta la llegada de Vázquez y Ferretti, el club apostaría por un modelo de gestión que combina la experiencia y el conocimiento de dos técnicos reconocidos.
Sin embargo, si la directiva decide mantener a Lema en el cargo, el entrenador deberá demostrar su capacidad para revertir la situación y llevar al equipo a los primeros puestos de la tabla. La presión sobre su gestión aumentará, y la falta de apoyo interno podría jugar en su contra.
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