El Club América ya está de vuelta en Coapa, pero el ambiente no es el de un equipo que se prepara para pelear por todo en el Clausura 2026. La pretemporada arrancó con un fantasma que persigue a la directiva: no hay refuerzos. El plantel regresó con las mismas caras, las mismas dudas y una sensación de estancamiento que comienza a incomodar a la afición. ¿Qué está pasando en el mercado azulcrema?
La respuesta, por ahora, es simple: nada. Tras semanas de rumores, negociaciones fallidas y nombres que se esfumaron, el equipo sigue sin movimientos concretos. Lo peor es que, en lugar de avances, lo que llega son ofrecimientos que, lejos de resolver el problema, lo hacen más evidente. América no quiere improvisar, pero el tiempo apremia y la presión crece.
Marcelo Flores, el ofrecimiento que no convenció
En las últimas horas, un nombre resonó con fuerza: Marcelo Flores. El mediocampista de Tigres fue puesto sobre la mesa como una posible solución para el equipo de André Jardine, pero la respuesta desde Coapa fue contundente: no gracias. Según fuentes cercanas al club, la directiva no lo ve como una opción viable para el proyecto.
El rechazo no fue por capricho. En América analizan con lupa cada movimiento, y en este caso, Flores no cumple con lo que buscan. Su perfil, su momento deportivo y, sobre todo, su encaje en el esquema de Jardine no terminan de convencer. No es un tema de calidad, sino de necesidad. El equipo ya ha cometido errores en el pasado al aceptar jugadores por "tapar huecos", y no piensan repetir la historia.
Tigres podría perder a Flores, pero América no lo quiere
Lo curioso del caso es que Marcelo Flores podría estar cerca de salir de Tigres, pero no hacia Coapa. El jugador, que ha tenido altibajos en su rendimiento, no parece ser prioridad para el equipo felino, y su nombre ha circulado en varios equipos. Sin embargo, en América prefieren mantener la calma antes que arriesgarse con un fichaje que no los llena.
La postura es clara: no a los parches. La directiva azulcrema sabe que la afición exige refuerzos, pero también entiende que un error en el mercado puede costar caro. André Jardine tiene un proyecto definido, y cualquier incorporación debe alinearse con su filosofía. Por ahora, Flores no entra en esos planes, y el club prefiere esperar a que aparezca una opción que sí valga la pena.
La presión crece, pero América no cederá
El silencio en el mercado no es casualidad. América está siendo selectivo, aunque eso implique soportar críticas y dudas. La afición quiere nombres, quiere emoción, pero el club parece decidido a no caer en la desesperación. No habrá refuerzos por refuerzos, y eso incluye decirle que no a jugadores como Marcelo Flores, aunque suene tentador.
El mensaje interno es claro: mejor esperar que equivocarse. La pretemporada avanza, los partidos de preparación se acercan, y la incertidumbre sigue ahí. Pero en Coapa no piensan moverse por presión. Si llega alguien, será porque realmente suma. Si no, el equipo tendrá que demostrar que, con lo que tiene, puede pelear por el título. ¿Será suficiente? El tiempo lo dirá.
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