El Guadalajara atraviesa un periodo complicado en el Clausura 2025, siendo la reciente eliminación de la Concachampions uno de los golpes más duros para el equipo. En medio de esta crisis, ha surgido una controversia relacionada con Javier Hernández, conocido popularmente como Chicharito, quien a pesar de su bajo rendimiento continúa siendo alineado por los entrenadores. Esta situación ha generado especulaciones sobre la influencia de Puma, el patrocinador oficial del equipo, en las decisiones de la dirección técnica.
A pesar de que el delantero ha demostrado un nivel por debajo de sus capacidades desde su regreso al club, varios entrenadores le han otorgado la confianza para seguir jugando. Este hecho ha llevado a la creencia de que Puma exige la participación constante de Hernández en el equipo. La situación ha sido comentada por diversos analistas deportivos, quienes sugieren que Puma podría estar pagando una parte del salario de Chicharito, lo que obligaría a la directiva a incluirlo en las alineaciones.
Un reportero de TV Azteca destacó que hay una “consigna de que tiene que jugar”, lo que ha desatado una serie de críticas en torno a la política del club. La influencia de la marca en las decisiones deportivas no es algo nuevo, ya que en el pasado también intervinieron en el fichaje de otros jugadores importantes. Se menciona que Puma “tiene injerencia en sus alineaciones debido a que pagaría parte del salario de Hernández”.
El hecho de que un patrocinador tenga este tipo de injerencia en las decisiones del cuerpo técnico plantea preguntas sobre la autonomía del club y su compromiso con el desarrollo de nuevos talentos. Muchos aficionados cuestionan por qué se prioriza a un jugador que no está en su mejor forma en lugar de dar oportunidades a jóvenes que podrían aportar frescura y energía al equipo.
El futuro de Hernández en el Guadalajara sigue en la mira, y con cada partido que pasa, la presión sobre él y la administración del club crece. La situación actual no solo afecta el rendimiento del equipo, sino que también impacta la percepción de los aficionados, quienes buscan ver al mejor Chivas posible en el campo.
El próximo partido del Guadalajara será crucial, no solo para determinar el rumbo del Clausura 2025, sino también para evaluar si la directiva reconsiderará su enfoque en las alineaciones y la influencia de los patrocinadores. La lucha por mantener un balance entre el rendimiento deportivo y los intereses comerciales se torna más intensa, y los seguidores del Rebaño Sagrado están a la espera de acciones concretas que prioricen el éxito en la cancha.
Comentarios: