El veterano artillero galo André-Pierre Gignac ha llamado la atención recientemente sobre las falencias del balompié azteca. En charla con medios de comunicación, el "Bomboro" puso sobre la mesa una aguda valoración sobre la problemática situación.
Desde su perspectiva, la escasez de nuevos talentos en la Selección Mexicana se justifica por entramades estructurales como la falta de desarrollo de jóvenes valores desde abajo.
A la par, destacó el buen trabajo que realizan algunas entidades enfocadas en potenciar promesas, poniendo a Chivas como ejemplo pionero en esa faceta. Su política juvenil les ha servido para elevar el nivel, aun recurriendo solo a nacidos en suelo azteca.
"Hay jugadores de segunda que se matan para ganar una final, llegar a Liguilla y no hay premio. El premio que pueden tener es que haya un jugador como Marín de Chivas, que hizo las cosas bien en segunda y agarró un club en primera", dijo.
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Para el toletero felino, es clave impulsar el ascenso y descenso nuevamente, así como invertir en categorías inferiores. Solo de esa forma surgirán prolíficos jugadores capaces de llegar a primera e incluso a la selección.
Gignac también resaltó la labor formativa en Francia, donde potencian a chavales desde temprana edad en centros especializados antes de unirse a clubes. Un sistema del que México podría aprender.
"Clairefontaine, que son jugadores de todo el centro de París y de alrededor pero pertenecen a un club y toda la semana trabajan juntos en el centro de entrenamiento de la selección francesa; duermen allí, comen bien, descansan bien y hay todo eso en la formación francesa", puntualizó.
Sus palabras pusieron sobre la mesa la urgencia de renovar el fútbol mexicano desde sus cimientos, con el fin de elevar el nivel competitivo y de las individualidades. Un diagnóstico que muchos coinciden en compartir.
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