La directiva del Club América sigue en silencio, pero la afición ya no aguanta más. Con el Clausura 2026 a la vuelta de la esquina, los seguidores azulcremas exigen refuerzos de jerarquía, convencidos de que el plantel actual no da para pelear títulos. La frustración crece día con día, y en las redes sociales ya hay un nombre que resuena con fuerza: Gabriel Barbosa, el Gabigol que todos quieren ver en el Azteca.
Mientras los rumores se multiplican, la pregunta es clara: ¿está el América dispuesto a pagar lo que cuesta un crack como el brasileño? La respuesta podría definir no solo el futuro del equipo, sino también la paciencia de una hinchada que ya no acepta excusas. El tiempo apremia, y cada día sin novedades aumenta la presión sobre Coapa.
Gabigol: el goleador que sueña el América
No es cualquier delantero. Gabriel Barbosa es sinónimo de goles, experiencia y títulos. Su paso por Europa, con el Inter de Milán y el Benfica, lo marcó como un jugador de élite, pero fue en Brasil donde explotó su mejor versión. Con el Flamengo, se convirtió en una pesadilla para las defensas, anotando 160 goles en 300 partidos y levantando trofeos como la Copa Libertadores y el Brasileirão.
Su currículum es impecable: dos Libertadores, un oro olímpico con Brasil y una capacidad goleadora que pocos en el continente pueden igualar. Justo lo que necesita un América que, en los últimos torneos, ha mostrado falencias en la delantera. ¿Será este el momento de apostar por un 9 de lujo?
El precio de un crack: ¿vale la pena?
Aquí viene el problema. Gabigol no es un jugador barato, y su contrato con el Cruzeiro lo ata hasta diciembre de 2028. Para llevárselo, el América tendría que desembolsar entre 10 y 15 millones de dólares, una cifra que no todos los equipos del futbol mexicano están dispuestos a pagar. Pero, ¿acaso no es el tipo de inversión que merece un club de su tamaño?
La afición lo tiene claro: si el objetivo es volver a ser protagonista en la Liga MX y en la Concachampions, hay que arriesgar. Un delantero como Gabriel Barbosa no solo garantiza goles, sino también jerarquía y liderazgo en el vestuario. La pregunta es si la directiva está dispuesta a dar el paso.
La presión de la afición: ¿hasta cuándo esperar?
Las redes sociales arden con el hashtag #QueremosGabigol, y los seguidores no ocultan su descontento. "Si no traen refuerzos de nivel, mejor no gasten", se lee en cientos de publicaciones. La exigencia es máxima, y el América sabe que, en un torneo corto como el mexicano, cada detalle cuenta.
El silencio de Coapa ya no es opción. La hinchada quiere respuestas, y si el nombre de Gabigol sigue sonando con fuerza, es porque representa lo que el equipo necesita: un goleador letal, con hambre de títulos y capacidad para decidir partidos. ¿Será este el movimiento que cambie el rumbo del América? El reloj corre, y la paciencia tiene un límite.
Comentarios: